Según una Comunicación Interna del Departamento de Marketing, Tecnocom está entre las 100 mejores empresas para trabajar en España, publicado en la revista Actualidad Económica. En concreto, en el número 96.
La empresa aprovecha su inclusión en esta lista para sacar pecho y reafirmarse en sus políticas de recursos humanos, basándose en los diferentes aspectos que valora el estudio.
Este es otro ejemplo más de cómo para esta empresa los trabajadores cada vez contamos menos, hasta el punto de hacernos partícipes de la noticia y mostrarla como todo un éxito, cuando la realidad manifiesta del día a día no se corresponde en absoluto. De nuevo, la “marca Tecnocom” es lo que prima, por encima de las condiciones laborales o la satisfacción de los que formamos esta empresa.
Y es que la realidad, más allá de las etiquetas o de cuestionables ‘rankings’, es que Tecnocom no cuida a su gente:
- No existen planes de carrera o una evaluación del desempeño objetiva y transparente. Y las que existen, son a dedo.
- Hay una gran cantidad de trabajadores que son tratados como moneda de cambio, a las que se racanean y discuten horas extras y guardias, y se les pagan los excesos horarios a final de año, en una práctica dudosamente legal y manifiestamente abusiva.
- Llevamos 6 años sin subidas salariales, y las pocas que hay son “discrecionales”, o dicho sin paños calientes: a dedo.
- En materia de horarios y conciliación, hay casi 400 trabajadores con Distribución Irregular de Jornada, sin jornada intensiva, en una época en la que hace falta más tiempo para estar con los niños. Por no mencionar las condiciones leoninas de los que trabajan a turnos.
- Las negociaciones del convenio se encuentran estancadas ante la desidia absoluta de la empresa para avanzar en los acuerdos.
- Por último, Tecnocom despide sin intentar siquiera ofrecer una alternativa profesional, mediante falsos despidos objetivos, que en la gran mayoría de los casos terminan siendo improcedentes en los tribunales, y que ponen en entredicho la honestidad de la compañía.
Estas no son sino unas cuantas de las razones por las cuales creemos que la Dirección de Tecnocom debe dejar de actuar de cara a la galería, buscando reconocimientos entre sus colegas empresarios, y volver la cabeza hacia quienes verdaderamente somos Tecnocom, sus trabajadores y trabajadoras, quienes llevamos ya demasiado tiempo aguantando cantinelas empresariales que nunca se traducen en bienestar para la plantilla.
