Hace un rato ha terminado el juicio que en su día interpuso la CGT, en solitario no lo olvidemos, para que Bankia compense a los afectados por la formación que unilateralmente y de “manera obligatoria” (y ese es el quid de la cuestión) ha impuesto a más de 5500 trabajadores (más los casi 300 del año pasado).
Al final, no ha habido otra opción: Bankia se ha negado en redondo a negociar de verdad. Porque no se puede llamar negociar a querer compensar las cientos de horas (unas 500/600 de las que 114 son “oficiales”) que los compañeros están dedicando a esa formación con 5 días (¡en dos o tres años!) y unos pocos puntos pdp. Y eso si apruebas!!!!!
No es de recibo que se pretenda que todo el ingente esfuerzo de la formación (esta y toda la demás) vaya a costa de los de siempre: los trabajadores. Como no tenemos bastante con el ingente trabajo y la presión de los objetivos del día a día, además tenemos que apechugar con unos cientos de horas de formación “extra” porque alguien decidió en su día que (venga a cuento o no) teníamos que ser los mejor formados de toda la banca.
Aunque ahora pueda resultar (estamos a la espera de ver que decide al final la CNMV sobre la capacitación) que toda esa formación haya sido al final una “boutade” (por ser suaves) de nuestros directivos hacia la plantilla.
Por ello, desde CGT, hubiéramos preferido llegar a un acuerdo satisfactorio para todas las partes, pero la cerrazón de Bankia a una negociación ha impedido cualquier acercamiento en las posturas y por tanto nos ha llevado a que sea un juez el que decida si la formación es voluntaria (como insiste Bankia) y, si no lo es (como sabe muy bien la plantilla), en que medida se debe de compensar.
¡Y luego nos dicen que somos nosotros los maximalistas y que no tenemos voluntad de negociar nada!
Salud.