HUELGA 8M, MOTIVO DE ORGULLO
La movilización feminista en España se convirtió el pasado día 8M en el foco de atención a nivel mundial, pero no creemos que sea necesario repetir aquí los titulares que han abalado el éxito de la convocatoria.
Lo que queremos es hablar del orgullo que nos produce pertenecer a un sindicato que entiende que la discriminación laboral de las mujeres deriva del hecho de que nosotras somos las responsables de realizar el trabajo doméstico, el cuidado de los hijos y el de los mayores.
Orgullo que sientes cuando personas ajenas a la organización de la movilización te felicita y te agradece el apoyo de la CGT: “sin vosotros esto no hubiera sido posible”.
Orgullo por el civismo con el que se desarrollaron todos los actos.
Orgullo de nuestros compañeros, por su apoyo. Y es que los hombres de calidad no solo no temen la igualdad sino que luchan por ella.
Orgullo y emoción al ver que, a pesar de la gravedad de las repercusiones que sufrimos por la desigualdad, unidas tenemos fuerza para hacer nuestras reclamaciones incluso de manera festiva.
Orgullo y emoción de haber sido un granito de arena en una manifestación que ha hecho historia.
Hoy nos sentimos más fuertes, libres y combativas para exigir la plena igualdad de derechos y condiciones de vida, para exigir una sociedad libre de violencias sexual contra las mujeres, para luchar por una educación libre de estereotipos.
Orgullosas de ser feministas.