La plantilla de Banco Santander denuncia que la entidad atraviesa un “momento de caos”, en el que un “alto porcentaje” de los trabajadores no están certificados (Mifid II) y, pese a ello, realizan operaciones que no deberían. Por este motivo, desde la cúpula de la entidad enviaron correos electrónicos en los que se ‘tiraba de las orejas’ a aquellos empleados que, sin el Mifid II, operaban con normalidad.
Según fuentes de la plantilla la mayoría de estas operaciones consisten en ventas de acciones que todos los empleados entienden que es una “mera ejecución de una orden expresa de un cliente, en el que no intervenía ni la información ni el asesoramiento”. Sin embargo, Banco Santander les ha advertido de que debido a “este incumplimiento estamos procediendo a informar a tu Dirección Territorial”.
Para la CGT, se trata de una comunicación de una falta laboral, que queda registrado en el expediente. Por ello, desde el sindicato recomiendan contestar al mail dejando claro que “la responsabilidad no es nuestra”. Según el citado sindicato, la “falta” viene dada por la “falta de información por parte de la empresa sobre el sistema de supervisión que a 31 de diciembre de 2017 aún no había sido comunicado”.
Y es que la plantilla entiende que es el banco quien debe bloquear informáticamente aquellas funciones que por perfil y nivel no puedan ser desempeñadas por quien no tenga aún el certificado. Fuentes próximas a Banco Santander explican, sin embargo, que “toda la plantilla ha tenido la oportunidad de examinarse”, con lo que entienden que quien no se haya sacado el Mifid II, es porque no ha podido o no ha querido.
“Ahora es por el Mifid, hace no mucho tiempo tuvimos una oleada de cartas por faltas de efectivo en ventanilla, no llevar el control documental al día, disposiciones fraudulentas o cualquier tipo de circunstancia propia de nuestro trabajo y no siempre achacable a nuestra falta de profesionalidad, si no al desamparo y escasos medios en los que la mayoría de las veces nos encontramos”, reza un explosivo comunicado interno de CGT al que ha tenido acceso OKDIARIO.