CaixaBank comunica a los sindicatos que despedirá a 2.157 trabajadores
CaixaBank ofrece cubrir el ERE planteado para 2.157 personas en España con bajas indemnizadas, sobre todo para mayores de 53 años, pero prevé aplicar despidos forzosos, con una indemnización de 30 días por año trabajado con un máximo de 22 mensualidades, si no se alcanza la cifra prevista, según los sindicatos.
Fuentes sindicales han explicado que el banco ha dividido el personal susceptible de formar parte del ajuste de plantilla en tres colectivos diferentes: menores de 53 años, trabajadores de 53 y 54 años y personal a partir de 55 años.
A los primeros, los menores de 53 años, les ofrece una indemnización equivalente a 33 días por año trabajado con un máximo de dos anualidades, mientras que a los empleados de 53 y 54 años les abonaría una indemnización equivalente al 50% de su salario regulador de cinco anualidades, y les pagaría el convenio especial con la Seguridad Social hasta los 60 años.
En el caso de los mayores de 55, les plantea la misma indemnización que al anterior grupo (el 50% del salario regulador que percibirían durante los cinco años siguientes), aunque en este caso se les pagaría un convenio especial con la Seguridad Social hasta los 63 años.
Los despidos afectarán a trabajadores de 50 provincias, de las que quedan excluidas Teruel y Barcelona. Además, de esos 2.157 empleados, 1.913 pertenecerán a la red de la entidad y 244 a los servicios centrales de apoyo, tal y como confirmaron fuentes sindicales a EL MUNDO.
Según los sindicatos, las fechas de salidas las plantean entre 2019 y 2020, con diferentes ventanas para cada uno de esos años. Además, el orden de salidas sería en función de las integraciones de oficinas que se fueran produciendo.
Salidas forzosas
En caso de no llegar a la adhesión de la totalidad del ERE de forma voluntaria, CaixaBank podría amortizarlos de manera unilateral, aplicándose a estas salidas 30 días por año y un máximo de 22 mensualidades. La apertura del proceso de petición de desvinculación se iniciará a lo largo del primer semestre de 2019.
Por otro lado, el banco catalán ofrece una compensación de 5.000 euros en las movilizaciones geográficas provinciales forzosas en caso de que el desplazamiento sea superior a 100 kilómetros de su lugar de trabajo actual.
Asimismo, la entidad ha manifestado que quiere ampliar todo tipo de horarios, pero sin aumentar la jornada anual, y el horario singular flexible de 100 tardes afectará a todos los gestores de la red de oficinas.
Lo que sí se ha indicado es que, en el marco del mantenimiento de la red de oficinas rurales, el aumento del número de oficinas S1 (unipersonales en localidades rurales) afectará fundamentalmente a las poblaciones de menos de 10.000 habitantes. Concretamente en estas oficinas, el banco ha ‘concedido el beneplácito’ de no trabajar dos tardes.
«No le daremos a la dirección un cheque en blanco para que inicie nuevas movilidades de manera unilateral y forzosa, es una experiencia muy negativa para la plantilla afectada y sus círculos familiares y personales», advierten desde CCOO.
De su lado, el sindicato SECB denuncia que estas condiciones de salida son «patéticas e inaceptables» y asegura, junto a CCOO, que «no habrá negociación» sin la condición de voluntariedad.