Ya todo el mundo apoya la fusión entre la cuarta y la quinta mayores entidades del país: BCE, Banco España, Gobierno y Oposición, presidencia de ambas entidades, …, sólo ven ventajas en la unión para crear el mayor grupo financiero por activos, pero nadie habla del coste laboral que supondrá, que desde CGT estimamos, a medio plazo, en diez mil puestos de trabajo.
Sinergias de 600 millones, sentido estratégico y de negocio, complementarias por modelo de negocio, mayor grupo financiero por activos, …, todas las partes se frotan las manos ante la inminente operación. Pero ¿qúe pasa con el empleo? Ambas plantillas suman más de treinta mil puestos de trabajo directos en el país, con unas duplicidades territoriales tan evidentes que, a medio plazo, se destruirán miles de empleos sin solución anunciada. Para muestra un botón: