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Roma no se hizo en un día, Caixabank lo pretende

¡Lo importante son la personas!

Es el mantra de nuestra empresa.

Y cuando lo oímos en los centros de trabajo nos quedamos un poco perplejos.

Porque cuando alguien considera importante algo, lo normal es cuidarlo, mimarlo y tratarlo bien para que “sienta los colores”.

Sin embargo, nos encontramos con que “del dicho al hecho va un trecho”. Y ese trecho es que lo importante para CaixaBank son “determinadas personas”: en concreto una “élite meritocrática” que se ocupa de presionar, hostigar, incomodar, incordiar…al resto de personas de la organización para que “les” consigan los objetivos y los números (lo realmente importante para ellos) que les permitan seguir manteniendo su posición y sus gabelas.

Y si eso ya es duro en CaixaBank, hay que ponerse en el lugar de la plantilla proveniente de Bankia, que de repente se encuentran en una nueva organización, con unos métodos totalmente diferentes, y que sin dejar de ser Bankia (operativamente lo serán hasta noviembre), tienen que seguir cumpliendo con sus objetivos, pero además hacer los “push” de CaixaBank.

Y eso, aderezado con las decenas de cursos de formación de todo tipo y color que se les vuelcan continuamente en la Plataforma de formación. La mayoría “normativos”, aunque si no son normativos, como si lo fueran (“hay que hacer todos los cursos para integrarse en la cultura de CaixaBank” es la cantinela que continuamente les llega desde las DNA’s). Y eso, sumado al LCCI, Mifid II…son decenas o más bien cientos de horas que van a parar a la “buchaca” de los compañeros.

Por cierto, lo que si echan de menos es un buen curso de venta estilo “Teletienda”.

Como muestra, un botón: los Asesores Financieros de la antigua Bankia, tienen unas carteras con más de ¡900 clientes!, a los que hay que vender fondos de inversión, tarjetas de crédito, seguros, planes de pensiones, hacer testamentarías, atender miríadas de consultas, trabajos administrativos y quejas (comisiones, digitalización, remediaciones, datos fiscales…). Ahora sumando las campañas “push” CaixaBank. Y todo ello de manera presencial, a través del correo electrónico, el “muro”, el teléfono móvil, el fijo, el whatssapp….A eso hay que sumarle la antedicha formación (“toda normativa”), las reuniones “voluntarias” pero a la vez “todas normativas”. ¿Dónde queda la vida (no digamos ya la “conciliación personal y familiar”) de estas personas?

Y todo esto lo tenemos que hacer en medio de la “generosa oferta” que nos hace la Dirección de “echar a 8300 personas ¿importantes?” a la calle en unas condiciones misérrimas, la “amenaza de cierre” de más de 1500 oficinas (¿y en SSCC?), la “oferta” de homologación de salarios en el “sótano”, la pretensión de rebajarnos nuestros planes de pensiones, complementos…A la vez que esa supuesta “élite meritocrática” se los suben sin ningún rubor ni vergüenza.

Por supuesto, que mientras, seguimos atendiendo con nuestra mejor cara a una clientela que no para de preguntarnos que va a pasar con “su oficina” de toda la vida, si va a tener algún problema con las libretas o las tarjetas, si va a tener que pagar más comisiones con la fusión, si va a tener que llevarse parte del dinero a otra entidad “por si pasa algo”…

Y si nos toca tomarnos un orfidal, un diazepam…para poder sobrellevar la tensión y no coger una baja laboral ante el riesgo de entrar en la “lista negra”, pues que le vamos a hacer: ¡es el mercado amigo!

Porque obviamente confiamos en nuestro Presidente y nuestro Consejero Delegado cuando nos dicen que lo importante son las personas. Aunque en nuestro fuero interno, muchos y muchas tengamos claro que, parafraseando a Napoleón en Animal Farm: “todas las personas son importantes, pero algunas pocas son mucho más importantes que todas las otras”.

Salud y lucha.

Enlace permanente a este artículo: https://fesibac.org/2021/05/21/roma-no-se-hizo-en-un-dia-caixabank-lo-pretende/