Desde primeros de año, asistimos al arranque de una nueva etapa en JLL Valoraciones, empezando por el nombramiento de un nuevo equipo directivo en nuestra empresa, algo que resultaba ya absolutamente imprescindible.
En el mes de septiembre del año pasado, esta Sección Sindical remitió un escrito a la Dirección de JLL España, donde se alertaba sobre la delicada situación organizativa por la que atravesábamos, y la incidencia negativa que ello estaba generando a nuestra actividad y al negocio. Poco tiempo después se nos anunció la incorporación del actual equipo directivo de Valoraciones. En este sentido, es justo reconocer la ágil respuesta por parte de la Dirección de JLL España, para poner fin a una situación que resultaba ya del todo insostenible. Seguramente, ya se llevaba fraguando durante algún tiempo, sobre todo porque hay cosas que son difícilmente maquillables, pero aun así consideramos nuestra obligación poner en conocimiento de las altas jerarquías algunos datos de lo que estaba ocurriendo. Del mismo modo, recientemente nos hemos vuelto a dirigir a los mismos responsables para mostrar nuestro reconocimiento al haber buscado soluciones.
No es el momento de pronunciarnos sobre la idoneidad de la solución aportada, pero lo que es innegable es el nuevo enfoque y los cambios que ya se han puesto en marcha en nuestra estructura organizativa por parte del nuevo equipo directivo, y el tiempo será testigo de lo acertado o no del nuevo rumbo. Lo que la inmensa mayoría de la plantilla teníamos claro, es que la anterior Dirección no se encontraba a la altura de las necesidades de nuestra Empresa, y estaba poniendo en grave riesgo la adecuada marcha de la misma, tal como ya manifestamos en anteriores comunicados. Ahora lo que procede es contribuir entre todos/as a mejorar las cosas, colaborando con la nueva Dirección para superar la complicada herencia recibida. Para empezar, hemos tenido la oportunidad de ser escuchados, lo que además, le ha servido a la nueva Dirección para identificar las carencias existentes y no volver a cometer los errores del pasado.
La cruz de la moneda, nos la estamos encontrando en la política mantenida desde RR.HH., que sigue adoleciendo de los tradicionales vicios corporativistas propios de JLL. Es cierto que se están consiguiendo superar algunas cuestiones, como por ejemplo las derivadas del cambio de Convenio Colectivo, aunque en este capítulo hay algunas en las que se nos siguen poniendo dificultades. Sobre esto os informaremos de forma pormenorizada en próximos comunicados. Sin embargo hay otras cuestiones de calado en las que aún queda mucho por hacer, ya que la Empresa se ha enrocado en unas posturas que van a hacer difícil evitar conflictos. A saber;
- Seguimos a vueltas con las cláusulas de los nuevos contratos de trabajo, donde si bien es cierto que ha existido alguna tibia mejora con la supresión de algunas de ellas, se siguen consignando otras que consideramos abusivas.
- Tampoco se están pasando a la firma a las nuevas incorporaciones, los Códigos Éticos de JLL en las mismas condiciones acordadas en su día para la plantilla de T.H. Recordemos que dichos códigos resultan controvertidos, ya que algunos de sus contenidos son de dudosa legalidad.
- También estamos teniendo problemas con la documentación legal que se debe entregar al Comité de Empresa, donde de un tiempo a esta parte, se nos han restringido datos imprescindibles para realizar nuestro trabajo de vigilancia y control. ¿Tendrán algo que ocultar?
- Seguimos a la espera de que se atienda nuestra solicitud realizada hace seis meses, para la apertura de una negociación relativa al adecuado control y remuneración de las horas extra.
Estos son solo algunos de los temas pendientes, y os iremos informando sobre su situación y las actuaciones que tengamos que llevar a cabo.
