Desde CGT hemos venido manifestando en anteriores comunicados, que ante las propuestas de subidas salariales irrisorias, para mayor escarnio compensables y absorbibles, efectuadas por la patronal bancaria en la mesa de negociación del XXV Convenio Colectivo para el periodo 2024-2027, era necesario acudir a acciones directas en legítima defensa de los intereses de las plantillas.
Es por ello, por lo que manifestamos públicamente nuestro respaldo y adhesión a la convocatoria de paros parciales convocados en el sector para el próximo 26 de febrero entre las 08:00 y las 10:00 horas.
Ha llegado la hora de que las plantillas del sector manifiesten de manera clara su indignación, secundando mayoritariamente el paro convocado, lanzando así un mensaje inequívoco a la patronal bancaria, y por ende a sus bancos asociados, de que no están dispuestas a soportar la continua pérdida de poder adquisitivo que vienen sufriendo y a quedar al margen del reparto de los beneficios récord que éstos están obteniendo, gracias precisamente a su trabajo, esfuerzo y dedicación. De que no van a consentir que esos beneficios sean repartidos exclusivamente, vía pago de dividendos, entre los accionistas y vía pago de mareantes retribuciones, entre la alta dirección.
La patronal bancaria no debe tomar estos paros como un acto hostil, tal como viene equívocamente manifestando, sino como una oportunidad que se le está ofreciendo para que recapacite y se tome en serio las justas reivindicaciones de las plantillas, evitando así una escalada en la intensidad de las acciones, que desemboque en la realización, entre otras, de una huelga sectorial de 24 horas el 22 de marzo. Esperemos que la aproveche.
