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La «obediencia debida» no justifica el daño

De todos es sabido que el 14 de Febrero en Pamplona y el 23 en Madrid, nos reunimos centenares de personas para apoyar a dos compañeras despedidas; nuevas víctimas del sistema de despidos establecido por el BBVA.

Para la naturaleza humana resulta muy duro el ejecutar ciertas ideas/órdenes que te prefijan desde otros estadios de poder, y eso lo saben los que dirigen las organizaciones. Por esto, lo que se suele hacer es disgregar la ejecución de las órdenes en distintos estadios.

Todos los sistemas autoritarios lo tienen bien organizado. Desgraciadamente y salvando las distancias, tenemos muchos ejemplos en la Historia de situaciones que esperamos no se vuelvan a repetir pues acabaron en tragedia y las decisiones se tomaban en compartimentos estancos. Nadie es ejecutor directo. ¡Conciencia tranquila! Además, si no lo hago yo, otro lo hará… y a saber qué hacen luego conmigo.

Hoy, unos sólo piden nombres, otros sólo hacen una lista, otros sólo comunican que estás en el “engagement”, otros sólo te dicen que vas a tener un seguimiento y unos cursos (que nunca llegan) y otros sólo deciden de entre la masa a los elegidos… otros sólo leen la carta, otros sólo la firman. ¡Conciencia tranquila! Además si ya tengo una víctima los que se quedan están más tranquilos porque a ellos no les ha tocado… y con mirar para otra parte…

La actual estrategia de Recursos Humanos es nefasta y tiene un corte autoritario y deshumanizado inaceptable. Quienes la han decidido cuentan con que los Gestores de Personal la ejecuten. Estamos convencidos que no les gusta, pero lo consideran parte del sueldo.

Lo cierto es que esos Gestores de Personal, en alguna Territorial, ya están llamando a las personas que han sido catalogadas con la «A» para ofertarles salidas del Banco, eso sí, sin presión alguna… ¡qué no se diga!

Otra vuelta de tuerca: ¿Quién les ha dicho a ciertos señores que ellos están en situación de decidir quién se va a la calle? Hagamos cambio de papeles; ahora nos toca decidir a la masa: Estamos hartos. ¿Por qué tenemos que aguantar la ineptitud de ciertos directivos o gestores de personal? ¿Ellos no tienen “Engagement”? Hemos asistido atónitos a malas redacciones de contratos (errores operativos), oficinas sin nadie porque se han olvidado de hacer la gestión de llamar al ETT, de los traslados mejor ni hablamos, etc., etc., pero a ellos no les pasa nada.

En otras ocasiones añaden malas formas en el modo de dirigirse a sus supuestos clientes, que casualmente somos nosotros. Aquí todos venimos a trabajar y levantar esta empresa, que otros comprometen con decisiones estratégicas lastimosas, por lo que nadie tiene que soportar las malas formas de nadie.

Llega un momento que de tanto tensar la cuerda se rompe… y se lo hemos advertido al departamento de RRHH… Ups ¡talento y cultura!. Desde T&C nos confirman que esta nueva política de despidos a goteo parece que va a ser la tónica del año en curso. Y nos preguntamos: ¿En un banco como éste, con los millones de euros que gana en plena crisis, no cabemos todos?

Nos quieren hacer creer que no poner en marcha un ERE en BBVA es una cuestión de justicia. “En un ERE salen los malos… y los buenos” (sic) y se arrogan la potestad de elegir quienes son unos y quienes son otros. Si los despedidos son “malos”
¿Porqué reconocen la improcedencia de los despidos? Curiosamente, ninguna de las personas despedidas era la última del ranking respectivo. El ERE, evidentemente, tiene desventajas… para el Banco también. Pretenden tenernos acogotados a todos mientras nos van despidiendo gota a gota.

Algo ha cambiado desde el 8 de Junio… algo nos ha unido un poco más a TODOS. Es tan evidente que el Engagement sólo es una lista de «aislados»… Es tan evidente que cualquiera puede estar en ella, si no es hoy, puede ser mañana… Es tan evidente que los despedidos ni siquiera son los últimos en los propios rankings… Es tan evidente que es un atropello que estos despidos sean directos y no fruto de un Expediente Disciplinario, con posibilidad de defensa… Es tan evidente que el «goteo» de estos despidos trata de extender el dolor y generar miedo en los que seguimos…

Sí, señor ¡algo está cambiando en la plantilla, algo está demandando reaccionar! Pero no nos engañemos los primeros que tenemos que reaccionar, organizarnos y actuar somos la propia plantilla… y vuestra representación – los delegados sindicales- antes que nadie.

¿Caminamos juntos? Desde CGT extendemos la mano a TODOS EN BUSCA DE UNA PRONTA Y JUSTA SOLUCIÓN.

En CGT siempre hemos apuntado al camino que sea justo, porque a la postre es el eficaz.

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