Y bien decimos “descontrol”. Ya se nos ha informado por parte de algún Sindicato que el Tribunal Supremo con su Sentencia ha dejado sin recorrido esta reivindicación laboral.
En CGT creemos que hay que seguir en la brecha, más allá de que se nos sacase de la negociación, pasándola de BBVA al Sector. Ha quedado claro que lo único que con ello se pretendía era “dar largas” hasta que saliera la Sentencia del Supremo. CGT ya hemos abordado nuevas iniciativas ante la Inspección Central de Trabajo pues, aún sin sistema de control “ad hoc”, es posible evidenciar la existencia de prolongaciones de jornada que BBVA “no quiere ver” mediante métodos de control ya establecidos por el propio Banco. Además, según algunos medios, la Inspección de Trabajo comparte nuestro criterio y “seguirá exigiendo a las empresas el registro de la jornada diaria”.
Recordad que la Sentencia no limita la reclamación de las horas extraordinarias, sólo (¡y vaya sólo!) indica que no hay ninguna “ley” que obligue a las empresas a llevar control horario de sus empleados. Curioso, cuando hace pocas fechas se ha despedido a un compañero por Causas Objetivas por absentismo. ¿No habíamos quedado en que nos controlamos cada uno? Lo dicho: la Ley del embudo (lo ancho para BBVA lo estrecho para sus empleados).
