El periodo estival es aprovechado por las partes interesadas para ir vertiendo noticias tendenciosas con la intención de impulsar unas, trabar otras, controvertidas opciones del proceso de reconversión bancaria, que ya dura en nuestro país más de 10 años. Da igual que se hayan destruido mas de 90 mil puestos de trabajo hasta la fecha, no importa que acaben con otros 30 mil. Lo verdaderamente importante es quien ostentará los puestos de presidencia, dirección, consejos de administración y que se reduzca el número de entidades bancarias.
De esta forma nos hemos enterado que la cúpula de banco Sabadell daba por buena una fusión con BANKIA (ya no interesan las pequeñas entidades, abandonadas a su suerte a la espera de su autoeliminación inminente, provocada por los continuos nuevos requerimientos del BCE), siempre que Oliú fuera Presidente honorífico y Guardiola Consejero delegado. Todo ello mientras defendían, a capa y espada, que banco Sabadell continuaría en solitario como uno de los grandes bancos del país. Sin importarles lo más mínimo el ingente número de puestos de trabajo que destruiría el enlace.
Según parece, para suerte de muchos, la operación se torció por el cambio de gobierno y ahora se trabaja en una posible fusión entre BBVA-BANKIA (mala suerte para otros), que consiguiría un cambio de rumbo en la cúpula de BBVA (más afín al nuevo proyecto de gobierno) y resolver de un solo pelotazo la inversión pública en BANKIA. De nuevo se repetiría la masacre de puestos de trabajo, que como sabemos no le importa a casi nadie.
Tampoco es una sorpresa que las y los dirigentes bancarios de nuestro país velen 100 % por sus intereses personales: a ello se han dedicado plenamente hasta el momento, contando con grandes sueldos, pensiones e indemnizaciones por lo que pueda ocurrir si acaban descolocados en la jugada final.
Mientras tanto las plantillas de las entidades bancarias en reconversión continua, seguimos trabajando hasta la extenuación, prolongando ilegalmente nuestra jornada, aceptando la situación descrita por unas palmaditas en la espalda que premian lo bien que lo hacemos, hasta que llegue el momento de la patada en el culo y si te he visto no me acuerdo.
Lo realmente sorprendente es que los sindicatos que ostentan la representación mayoritaria de las plantillas de BS y resto del sector bancario, continúen dando la callada por respuesta, que apoyen las fusiones una vez tras otra, firmando los despidos colectivos que conllevan, que no sean capaces de enfrentarse a la situación descrita,…, pero claro cuentan con el apoyo mayoritario de las y lo trabajadores del sector, que incomprensiblemente, una vez tras otra, avalan mayoritariamente su pésima gestión en las elecciones sindicales.
CGT (ya somos el tercer sindicato con mayor representatividad en el sector) sigue postulándose como la alternativa a la situación descrita, oponiéndose a la reconversión, a los despidos colectivos, al oligopolio bancario que vivimos y defendiendo:
– El mantenimiento de nuestros puestos de trabajo
– El mantenimiento de nuestras condiciones laborales
– El mantenimiento de nuestro sistema público de pensiones
– Una banca de calidad al servicio de nuestra sociedad
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LA ALTERNATIVA SINDICAL EN BANCO SABADELL
LA ALTERNATIVA SINDICAL EN EL SECTOR DE BANCA
